jueves, 10 de julio de 2008

ALERTA EN LAS PLAYAS POR MEDUSAS


Esta noticia aparece hoy en el diario montañes y habara que tener mucho cuidado si hoy vamos a la playa sobre todo con los niños ya que esta especie de medusa es bastante peligrosa.

especie "potecialmente peligrosa"
Protección Civil alerta a todas las playas de la aparición de medusas
Aconseja prohibir el baño en San Vicente de la Barquera, Oyambre y alrededores y recomienda no meterse en el agua en el resto de los arenales de la región



La Dirección General de Protección Civil del Gobierno de Cantabria trasladó ayer a los coordinadores de los servicios de playas de San Vicente de la Barquera, Oyambre y alrededores la conveniencia de prohibir el baño ante el avistamiento de una especie parecida a la medusa considerada «potencialmente peligrosa». Además, extendió el aviso al resto de playas de la región para que se proceda al izado de la bandera amarilla y se desaconseje el baño como medida preventiva.

Vistas por cientos en las playas asturianas hace apenas unos días, las 'carabelas portuguesas' -pólipos similares a las medusas que la ciencia llama Phisalia phisalis- se han aproximado a las cántabras sembrando entre los expertos una ligera sensación de inquietud por la sencilla razón de que su ataque puede resultar de extrema gravedad para niños, ancianos y personas con dificultades respiratorias e, incluso, causarles la muerte. Una faena para los bañistas, pero es lo que hay.

Según explicaron ayer fuentes del Gobierno de Cantabria, el aviso parte de la Dirección General de Biodiversidad, que a primera hora de la mañana avistó varias 'carabelas portuguesas' muertas en el Parque Natural de Oyambre y, consciente de su peligrosidad, decidió dar cuenta de su hallazgo a la Dirección General de Protección Civil, que se puso en marcha inmediatamente.

Por lo pronto, ya ha trasladado a los coordinadores de playas de San Vicente de la Barquera, Oyambre y alrededores la conveniencia de prohibir el baño a sus usuarios y recomendado a los responsables del resto de los arenales regionales que arríen la bandera verde e icen la amarilla hasta ver qué pasa en las próximas horas.

Y pasará lo que la corriente quiera que pase. Al menos eso piensan los expertos.

La 'carabela portuguesa' carece de capacidad de movimiento. Su presencia en la costa no depende por tanto de los cambios de temperatura del agua sino de los vientos y de las mareas. Es decir, que si la corriente las atrae a Cantabria, las medidas se extremarán. Y si las aleja, la alerta será desactivada y a otra cosa.

Así que los servicios de emergencias miran hacia Asturias, donde hace justo una semana, el día 2, no sólo se recogieron de las playas más de 50 'carabelas portuguesas' sino que, además, se avistó un banco con varios cientos de ejemplares. Lo vieron a unas seis millas del puerto de Llanes y arrastrándose hacia Cantabria, donde ayer aparecieron muertas las primeras. En Oyambre, donde la Cruz Roja reforzó la vigilancia de las playas por mar y tierra, los socorristas no percibieran nada raro.

FERNANDO SOLAR MÉDICO DE PLAYAS DE CRUZ ROJA
«No las toquen»
Aunque no es la primera vez que las ve, a Fernando Solar, médico de playas de Cruz Roja, se le hace raro que hayan aparecido este tipo de pólipos aquí. Y más en un cubo de la basura de la playa de La Magdalena, donde alguien ha dejado dos. Sea como fuere, pide a los bañistas que si se las encuentran, «no las toquen».

Solar explica que estas 'cosas' «liberan un producto urticante que produce picor, quemazón e incluso pueden dejar cicatriz». Eso, en el mejor de los casos. Puestos en el peor, «las personas con reacciones alérgicas graves pueden sufrir mareos, vómitos, dificultad para respirar y, bueno, en casos extremos... pueden morir, sí. Sucede como con las avispas».

El doctor, que insiste en la importancia de «no tocarlas», explica qué debe hacer un bañista que haya tenido un contacto con las 'carabelas portuguesas': «Retiren los restos del pólipo, pero sin frotar la zona afectada sino extrayéndolos y sin tocarlos directamente. Usen guantes. Luego lávense con agua salada -no dulce, eso libera el veneno- y después apliquen un corticoide para el escozor, hielo para la inflamación y un antiséptico para la herida».

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